Los trolls

Los trolls en internet nada tienen que ver con estos seres adorables que, por ejemplo, aparecían en la película de Disney "Frozen".

Los trolls son usados para referirnos a aquellas personas que publican mensajes instigadores en los vehículos de comunicación de Internet, como son: los blogs, foros, publicaciones en facebook, etc. Suelen hacer publicaciones que son irritantes y su propósito es molestar, provocar o crear controversia que, para nada, suele ser constructiva.

Se usa también el concepto trolling para hacer alusión a los comentarios que se realizan.

Lindy West dio un concepto de trolling o troll en internet basándose en sus propias experiencias personales. Esta mujer dice que es una forma de abuso por recreación que se oculta o que se aprovecha del anonimato. A veces se trata de conductas inofensivas o inmaduras, pero en ocasiones llega a tratarse de acciones que rayan el acoso peligroso y hostigamiento.

El flaming, por el contrario, es el acto de atacar a alguien en línea y, se diferencia del trolling, en que éste es un acto habitual y el flaming es algo que puede ser ocasional o el resultado de un conflicto personal.

Los trolles se esconden en el anonimato y en la pérdida temporal de identidad y, por este motivo, se pueden comportan de un modo que no lo harían en el día a día. Se suelen liberar en sus comportamientos, los cuales llegan a ser maquiavélicos, psicópatas, sádicos o combinar ambos. Algunas de las personas que realizan estas prácticas, reconocen que lo hacen movidas por situaciones personales negativas o por episodios depresivos.

A continuación enumeramos una serie de características:

• Los troles son inmunes a críticas y argumentos lógicos.
• No sienten remordimientos.
• Se ven a sí mismos por encima de las convenciones sociales.
• No se apegan a las reglas básicas de convivencia o de educación básica.
• Consideran que están por encima de cualquier responsabilidad o limitante social.
• Se alimentan de tu enojo y de los insultos que les dirijas.
• Hay dos formas de lidiar con los troles: ignorarlos o bloquearlos, para que así no puedan hacer publicaciones.
• Lo que motiva al trol es el poder alimentar su ego sin tener que sufrir las consecuencias de sus actos. Se escudan en la anonimidad que da Internet para dar rienda suelta a sus necesidades de descargar frustración y odio hacia la sociedad y el mundo.

Los troles pueden hacer alguna de estas actividades:

• Publican comentarios hirientes dirigidos a una persona en específico. El Trolling incisivo puede llegar a ser considerado como ciber-acoso.
• Publican comentarios que provocan respuestas emocionales (usualmente de enojo) tocando cuerdas sensibles, usando racismo, intolerancia religiosa, puntos de vista con aires de superioridad, misoginia, ideas políticas extremistas o hasta cosas tan infantiles como burlarse de sobrepeso o defectos físicos de sus objetivos.
• Buscan ser el centro de atención, dominar la conversación, decididamente en actitud narcisista.
• Buscan desviar la atención del tema central.
• En algunos casos extremos, buscan callar a la persona objetivo. Por ejemplo, hay varios casos donde mujeres pro-feminismo son objetos de trolling y se les hostiga hasta que se abstengan de hacer comentarios o apariciones en eventos.

En la mayoría de los casos, para solucionar un caso de trolling, las páginas y editores, que publican contenido y reciben comentarios de sus visitantes, deben ser los encargados de dar la solución pertinente con medidas como, por ejemplo, evitar comentarios anónimos, revisar comentarios antes de publicarlos y bloquear a los troles potenciales. 

Pero quien publica contenido también puede hacer algo para evitarlo. Allá van una serie de consejos:

• Para los troles casuales, simplemente tenemos que ignorar sus publicaciones, aún cuando sea difícil dejar que tenga la última palabra, el que no exista una discusión los desmotiva.
• Para los troles incisivos, lo mejor es reportarlos a los moderadores del foro o vehículo donde estén publicando. Al final, los troles deben ser bloqueados, ya sea por su nombre de usuario o por su dirección IP. Otra táctica es dejar que los troles sigan publicando y, sin que se den cuenta, sus publicaciones sean invisibles para los demás usuarios, haciendo así que el trol esté perdiendo su tiempo.

También se considera un caso de trolling el hacerse pasar por otra persona con el fin de cumplir sus objetivos. Existen casos de troles hombres que se hacen pasar por mujeres para incitar a otros hombres, sobre todo adolescentes o jóvenes, a hacer avances, los cuales pueden llegar al sexting (http://familiaenredada.tformas.com/2014/08/sexting.html) para, al final, humillarlos con la revelación de que en realidad estaba tratando con otro hombre. 

Pero la falsificación más común es aquella en la que se hacen pasar por alguien que comparte los intereses del grupo. Por eso muchas páginas de Internet solicitan algún medio de identificación, por ejempl el correo electrónico. Pero esto no ha detnido del todo la aparición de los perfiles alter-ego en las redes sociales.