miércoles, 27 de agosto de 2014

Riesgos del sexting para la adolescencia

Los/as adolescentes que practican sexting se exponen a una serie de riesgos. Estos riesgos no tienen que aparecer de forma aislada, sino que, por el contrario, se pueden dar varios de ellos y las amenazas que se producen aparecen de forma entrelazada.

1. Amenazas a la privacidad del/la menor: una imagen de sexting se puede escapar del ámbito privado de forma voluntaria o de modo involuntario al perder el control de las imágenes de contenido sexual (robo o pérdida del teléfono móvil o acceso por terceros sin consentimiento).
2. Riesgos psicosociales: incluyendo los riesgos derivados de la exposición de la intimidad del/la menor ante otras personas.
3. Ciberbyllying (o acoso entre iguales).
4. Sextorsión: las imágenes o vídeos en manos de determinadas personas pueden servir para extorsionar, chantejear, amenazar a la persona que protagoniza las mismas. 
5. Grooming: esta situación puede estar íntimamente relacionada con la sextorsión.
6. Riesgos físicos y geolocalización: las aplicaciones de geolocalización y geoetiquetado de contenido multimedia pueden facilitar la ubicación física.


Las recomendaciones que podemos dar son las siguientes:
  • Prevención, la cual pasa por inculcar a nuestros/as menores en la cultura de la privacidad. Esto pasa por conseguir que los menores sean conscientes de los riesgos que existen al exponer datos personales públicamente y que aprendan a valorar la privacidad de sus datos.
  • Es importante que las madres, los padres y las personas que se dedican a la educación sean capaces de trasladar a los/as menores la confianza suficiente como para que, ante una incidencia en la Red, recurran a la opinión de una persona experta adulta.
  • Que los progenitores se encarguen de pagar la factura del teléfono móvil del/la menor puede ayudar a prevenir el sexting. 
  • En cuanto a los casos de sex-casting, ubicar el ordenador en un lugar común de la casa también nos puede servir como pauta de comportamiento a seguir para evitar situaciones de sexting.
  • Los/as adolescentes deberían seguir también estos consejos:
    • Conocer el nivel de seguridad y privacidad de los dispositivos y aplicarlo de una forma responsable.
    • No ceder ante la presión ni el chantaje.
    • No ser partícipe del sexting: ni creándolo ni reenviándolo ni fomentándolo.
 ¿Dónde podemos acudir si tenemos que denunciar una situación de sexting?
 

 RECUERDA:
 "Cuando envías una información, pierdes el control sobre ella y su destino. Piensa antes de publicar".

lunes, 25 de agosto de 2014

Sexting


Tendemos a usar palabras traídas de otros idiomas, en concreto del inglés, para aludir a acciones y conceptos. 

De pronto se ha vuelto de moda hacerse "selfies" cuando toda la vida se han llamado autofotos (que ahora te las haces sin ningún tipo de problema porque como las cámaras de fotos son digitales, no te tienes que gastar los euros en revelar un carrete donde seguro que no salen bien el 100% de las fotos).

¿Qué es el sexting?

Es un término inglés compuesto por "sex" (sexo) y "texting" (envío de mensajes de texto a través de los distintos dispositivos móviles). 

Consiste en la difusión o publicación de fotos, imágenes o vídeos de tipo sexual, producidos por la persona que lo envía, usando el teléfono móvil o cualquier otro dispositivo tecnológico.

Relacionado con esto tenemos el "sex-casting" que es la grabación de contenidos sexuales a través de la webcam y su difusión por e-mail, redes sociales o cualquier canal que permita las tecnologías.

Pensamos que tomarnos una foto con nuestro móvil y mandársela a nuestra pareja o a nuestra familia no entraña ningún problema. Y la verdad es que no, salvo que nuestro móvil se extravíe, nos lo roben o que alguien de nuestro entorno quiera hacer la gracia y jugar con un móvil que no es suyo y enviársela a todos tus o sus contactos. Eso es el sexting: el envío indiscriminado de fotos o vídeos o imágenes. Quizás el primer envío sea consentido, pero no los siguientes.

Siempre pongo el mismo ejemplo mediático, pero es que es muy gráfico: el sexting es lo que le pasó a Olvido Hormigos. Ella realizó un vídeo para enviárselo a alguien, pero ese alguien no lo guardó en la intimidad, sino que lo difundió; con las consecuencias que eso tuvo.

Hay que tener mucho ojo, como ya decimos, con la juventud y la tecnología. La juventud considera que es un acto de amor y de confianza mandar determinadas fotos o vídeos a su pareja o darle las contraseñas de sus correos electrónicos, móviles, etc. (aludiremos a esto en otro post). Pero no se dan cuenta de la importancia de la intimidad y de que hacer estas cosas no es una muestra de amor: ni pedirlas ni otorgarlas. Se pierde el control de nuestras fotos y vídeos cuando salen de nuestros dispositivos móviles. Una vez enviados, el control ya no está en nuestras manos.

La juventud envían sexting porque alguien se lo pide o simplemente por diversión, pero en muchas ocasiones es para impresionar a alguien o para sentirse bien.

Podemos plantearnos los siguientes aspectos a tener en cuenta a la hora de hablar de sexting:
1. Existencia de una voluntariedad inicial.
2. Uso de los dispositivos tecnológicos.
3. La persona que protagoniza las imágenes posa de forma erótica o sexual. 
4. No es un fenómeno exclusivo de la juventud. 

Pero, nos podemos preguntar el motivo por el cual los/as adolescentes son más vulnerables ante estas prácticas. Voy a dar unos motivos muy generales y específicos (lo dejo para vuestra reflexión):
1. Falta de la cultura de privacidad.
2. Menor consciencia de los riesgos.
3. Exceso de confianza.
4. Se produce el despertar sexual en la adolescencia.
5. Sexualización precoz de la infancia.
6. Inmediatez de las comunicaciones.


El vídeo que se comparte a continuación (de Pantallas Amigas) hace un resumen explícito y visual sobre el sexting. Espero que os guste
 







jueves, 21 de agosto de 2014

Apps sobre violencia de género y adolescentes

De nuevo remito al blog "conseguiremos la luna" donde informé sobre distintas apps (y otras herramientas y recursos) para ayudar a nuestra juventud a detectar casos de violencia de género en sus parejas.

Porque la red, internet no es sólo riesgos, sino que, acudimos a su "tirada" para prevenir a las personas sobre otros peligros. Se muestran distintos medios donde se da información a la adolescencia sobre los peligros de mantenerse en una relación "tóxica" donde el control, el dominio y la sumisión se encuentran presentes en el día a día. En las apps que aparecen existen vídeos testimoniales, juegos, test... 

No dudéis en visitarlas, descargarlas y navegar-curiosear en ellas.

Conseguiremos la Luna 
 
http://conseguiremoslaluna.tformas.com/2014/07/app-y-campanas-para-prevenir-la-vg-en.html

lunes, 18 de agosto de 2014

Privacidad, anonimato, libertad,…



Voy a comenzar este post con una frase radical de ésas que tanto me gustan: decía John McAfee: "¿Privacidad? Tirad vuestros Smartphone". ¿Y quién es este señor? John McAfee se hizo multimillonario con sus populares antivirus McAfee que después vendió por miles de millones a otra empresa. La verdad es que como vida ejemplar mejor no tenerla en cuenta, pero de estas cosas sabe un rato. Otra de sus perlas es "Lo más prometedor en privacidad son los teléfonos tontos", refiriéndose a aquellos que sólo sirven para llamar. "Yo estoy tirando todos mis smartphones", dijo.

El tema de nuestra privacidad es un tema complicado. Nuestro primer fallo suele ser colgar fotografías de manera indiscriminada en las redes sociales teniendo 750 “seguidores” o “amigos” a los que no conocemos de nada. Bueno, si los conoces nos alegramos de que tengas una vida social tan amplia. Pero cuidado con lo que compartes en las redes sociales.

La privacidad es algo tan complicado que, cuando instalamos cualquier programa o aplicación y nos sale la opción de “Acepto la política de privacidad y he leído las condiciones”, marcamos todos la casilla sin haberla leído realmente. Recuerdo la época en la que la gente dudaba si las fotos que colgabas en Facebook eran tuyas o pasaban a ser titularidad de la compañía.

El tema de la privacidad es algo interesante por muchas razones. La primera es que si no cuidamos este aspecto, nos exponemos en Internet a muchísimas dificultades. No falta quien hace uso de tus datos, de tus fotos, de tus datos personales. Hay quien no tiene empacho en poner que sale de vacaciones, a dónde va y cuándo regresa. En esta época en donde la información es un bien valioso, hay que andarse con más cuidado.

Cabe decir que la privacidad no solamente es poner controles a quién puede ver nuestros contenidos. Ponemos que sólo lo compartimos con nuestros amigos o con los amigos de nuestros amigos, pero no olvidemos que Facebook, dentro de su propio sistema, es el “gran hermano” porque lo ve todo y además, lo guarda para sí todo: fotos, vídeos, mensajes, incluso reportes que se le hacen a la red social.

Pero ¿cómo debemos cuidarnos? ¿Qué hacemos? La realidad es que no es difícil, y no se trata de poner controles para que otros no vean nuestros contenidos, cosa que desde luego, no es mala idea restringir. En realidad, sin embargo, lo más simple es seguir esta sencilla regla: “no publique en ninguna red social nada que no quiera que otros vean”. 
Pero, ¿qué importa que otros vean mis contenidos? Finalmente el que “nada debe nada teme”. Pues sí y no. Es cierto que uno podría pensar que publicar una foto de la comida en un restaurante, o bien, fotos de un evento que ocurrió en la ciudad, una marcha por ejemplo, no tiene mayores consecuencias. Podría uno estar simplemente “documentando” lo que está pasando, ¿no? Pues no necesariamente. Considerando que en Estados Unidos la Agencia de Seguridad Nacional –NSA-, vigila a mucha gente y que, además, debido a los ataques a las Torres Gemelas en Nueva York en el 2001, en donde Bush emitió una ley sobre “homeland security”, y gracias a esta ley prácticamente el gobierno norteamericano tiene derecho de entrometerse donde le dé la gana, cualquier actividad de cualquier ciudadano, la que sea, puede ser investigada.

Vale, es Estados Unidos. Chico, a mí lo que pase en Estados Unidos me puede dar un poco igual. ¡Qué exagerado eres!

Vamos a resumirlo: no publiques que vives en la Calle no sé cuál, número no sé cuántos y que te marchas de vacaciones de tal a cual fecha. Igual a la vuelta te encuentras el piso vacío. Así que si no lo haces por ti o por los Estados Unidos, por lo menos hazlo por tener televisión cuando regreses de las vacaciones.



1º. Limitar la cantidad de información personal que se comparte en las redes sociales, o al menos asegurarte que tus amigos en las mismas son realmente tus amigos. Y ya no hablemos de tus hijos. Cuidado con lo que dicen, ya que ellos tienen amigos en las Redes Sociales a cientos.
2º. Apagar o desconectar el servicio de localización geográfica para la mayoría de aplicaciones móviles que no la requieran, cerrar siempre la sesión de aplicaciones móviles en línea cuando se termine con ellas, no confiar en las redes Wi-Fi abiertas que se encuentran en aeropuertos, bibliotecas, universidades, cafeterías, investigar previamente antes de conectarse a ellas, y evitar este tipo de conexión para realizar intercambios de información privada.
3º. Una gran recomendación es no utilizar la misma contraseña para absolutamente todo. Conozco gente que tiene el pin del móvil como pin de la tarjeta de crédito, y la misma contraseña para los correos, la cuenta de iTunes o la de la tienda online en la que compra. Así lo pones muy fácil. Y más cuando es tu DNI o algo similar. Y por favor, mantén los dispositivos móviles con las últimas actualizaciones de software y seguridad y asegúrate de entender y hacer los ajustes apropiados de la configuración de privacidad de los servicios de Internet, aplicaciones móviles y dispositivos que se utilices.

Vamos a ir terminado que ya veo que te aburres y hablaremos sobre la privacidad en los smartphones. Sólo vamos a dar algunos consejos sencillos:
1º. Mantener actualizado tu terminal. 
2º. No conectarse a un wifi desconocido.
3º. Deshabilitar las localizaciones frecuentes (por ejemplo el iPhone puede recordar los sitios que más frecuentamos).
4º. Utilizar una contraseña numérica o alfanumérica.
5º. Evitar compartir tu ubicación con programas como Facebook Messenger que puedes tener activado sin saberlo.

Y para terminar, contaros que según últimas informaciones, Whatsapp cambiaría la configuración de la privacidad para saber si los mensajes enviados son leídos.